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Nubarrones sobre la paz en Colombia: Las FARC y un anuncio inquietante

El hombre que dirigió las negociaciones de la guerrilla con el gobierno de Juan Manuel Santos en La Habana, Cuba, aparece con uniforme militar, armado y rodeado de varios guerrilleros, también armados, entre ellos el controvertido ‘Jesús Santrich’ y Hernán Darío Velásquez, alias ‘El Paisa’, jefe del ala más sanaguinaria de las FARC.

“Anunciamos al mundo que ha comenzado la segunda Marquetalia (zona del centro de Colombia donde nacieron las Farc) bajo el amparo del derecho universal que asiste a todos los pueblos del mundo de levantarse en armas contra la opresión”, dijo Márquez en tono firme.

Agregó que esta organización seguirá denominándose Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia —FARC—, y que su objetivo central será “esa oligarquía excluyente y corrupta, mafiosa y violenta que cree que puede seguir atrancando la puerta del futuro de un país”.

Alias Iván Márquez —cuyo nombre de pila es Luciano Marín— acusó a los gobiernos de Juan Manuel Santos e Iván Duque de no respetar los acuerdos suscritos en 2016 que buscaban dar fin a un sangriento conflicto de más de medio siglo. De Santos dijo que no puso en marcha puntos fundamentales de los acuerdos como la titulación de tierras para guerrilleros y campesinos. Sobre Duque anotó que no ha cumplido con aspectos cruciales como la seguridad de los guerrileros desmovilizados, muchos de ellos asesinados en “medio de la indiferencia y la indolencia del Estado”.

En el video divulgado por internet durante la madrugada de este jueves, el guerrillero sostiene que el Estado colombiano lo obligó a él y a otros insurgentes “a retomar las armas y regresar al monte” y aunque anuncia que volverán a las armas, da a entender que no reanudarán los secuestros ni las acciones terroristas. Sin embargo, advirtió que dialogarán con empresarios, ganaderos, comerciantes y “gente pudiente” para “buscar por esa vía su contribución al progreso de las comunidades rurales y urbanas”.

Durante su intervención de media hora, Iván Márquez aparece acompañado de Seuxis Pasias Hernández, alias ‘Jesús Santrich’, integrante de la guerrilla acusado por Estados Unidos de narcotráfico y quien, al parecer, huyó de Colombia, y de Hernán Darío Velásquez, alias ‘El Paisa’, señalado por diferentes gobiernos de haber dirigido violentas tomas guerrilleras y atentados terroristas que dejaron cientos de muertos y heridos. En el video también figura Henry Castellanos, alias ‘Romaña’, insurgente al que organismos militares acusan de múltiples secuestros y extorsiones.

“Le fallaron a la paz”    

Rodrigo Londoño, alias ‘Timochenko’, último jefe máximo de las FARC y presidente del partido que aglutina a los exguerrilleros que se acogieron a los pactos de La Habana, criticó la decisión de los disidentes. En declaraciones a radioemisoras locales, señaló que el 90 por ciento de los insurgentes reintegrados a la vida civil “están con los acuerdos de paz suscritos con el gobierno de Juan Manuel Santos”.

En su cuenta de Twitter reafirmó que “las grandes mayorías seguimos comprometidos con lo acordado, aun con todas las dificultades o peligros que se avisoran… Nuestra palabra hoy es la paz y la reconciliación”.

Por su parte, el alto Comisionado de Paz del Gobierno, Miguel Ceballos, sostuvo que Márquez y sus compañeros “le fallaron a la paz y le están dando la espalda a un proceso que todos los colombanos queremos implementar”. En declaraciones a la cadena radial Blu, Ceballos señaló que los preocupantes amenazas de la disidencia son un desafío a la seguridad nacional no solo porque anuncian una especie de alianza con el Ejército de Liberación Nacional —ELN—, guerrilla que no ha firmado acuerdos de paz, sino porque el video se habría grabado en Venezuela bajo el auspicio del gobierno de Nicolás Maduro.

Ceballos pidió a la Jurisdicción Especial para la Paz —JEP—, organismo especializado en la aplicación de justicia en el marco de los acuerdos de paz, que excluya a Márquez, ‘Santrich’, ‘El Paisa’ y ‘Romaña’ de los beneficios otorgados por los pactos de Cuba a los exguerrilleros. También solicitó al partido FARC que expulse de sus filas a los disidentes.

Nota de redacción: Hasta el momento la Conferencia Episcopal de Colombia no se había pronunciado al respecto de esta situación que genera incertidumbre sobre la paz. 

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