“Con su traje de Ironman”, subió al cielo Benicio, el niño que conmovió al Papa

En abril de este año dábamos cuenta de la lucha de Benicio contra un tumor de cerebro, y de cómo el Papa Francisco se había comunicado con este niño de 9 años tras recibir su sencilla y emocionante carta.

El periódico Tiempo Sur, de la provincia patagónica de Santa Cruz, confirmó que el niño falleció el 12 de diciembre.

Su madre Analía escribió en su muro de Facebook, relata este periódico: “A las 15:05 del día de hoy, nuestro bello Benicio se puso su traje de Ironman y subió rápidamente a los cielos. Allí podrá correr y jugar y reír hasta cansarse, (que) era lo que más extrañaba. Tan valiente y aguerrido que pudo romper los barrotes de acero de esta cárcel llamada glioma”.

Benicio sufría un glioblastoma de tronco encefálico, y durante meses los papás juntaron fondos para poder viajar a Estados Unidos e intentar frenar su avance con un tratamiento que está siendo probado por el Hospital de Niños de Cincinnati.

Con el apoyo de la comunidad santacruceña y de los medios locales que se hicieron eco de su necesidad y de la generosa respuesta, se habían recaudado gran parte de los fondos necesarios para cubrir el viaje. Exfutbolistas de primera división habían incluso participado de un partido a beneficio en el mes de julio, confirmando que el apoyo a Benicio trascendía las fronteras de la Patagonia.

El 7 de abril Benicio le había enviado al Papa Francisco una carta de puño y letra acompañada con un dibujo del Papa sosteniendo una flor, que en pocos días llegó a las manos del Pontífice. El Papa retribuyó la carta con un llamado, y pudo escuchar de boca del niño el “te quiero mucho” con el que firmaba su carta.

Su despedida en el cementerio local fue multitudinaria, reseñan los periódicos de la zona. El Intendente de Río Gallegos Roberto Giubetich se expresó en bellas palabras sintetizando lo que significó para tantos vecinos acompañar a Benicio.

“Benicio está en paz, transpiró la camiseta luchando con valentía y fuerza, enfrentando lo que el destino le puso en frente y hoy tenemos la paz de que ya está descansando y que su imagen va a quedar como ejemplo de las cosas que cada uno de los vecinos o de nosotros, como padres o abuelos, debemos tomar”, explicó a La Opinión Austral.