Header Ads

¿Seguirán los hispanos en EEUU alimentándose de promesas de campaña?

Las próximas elecciones presidenciales en Estados Unidos, en 2016, tendrán una figura protagonista: la comunidad hispana. Los 55 millones de hispanos que viven en el país del norte se han convertido ya en el principal fiel de la balanza para decidir si es un Bush o un Clinton el que vuelve a la Casa Blanca.
 
Los dos más adelantados en cada uno de sus partidos, Hillary Clinton en el Demócrata y Jeb Bush en el Republicano, han relanzado -de la mano de las incendiarias declaraciones contra la migración mexicana de otro precandidato republicano, el magnate Donald Trump- sus campañas con un objetivo: conquistar al votante hispano.
 
Bush -ex gobernador de Florida- tiene la ventaja de estar casado con una mujer nacida en Guanajuato (México); pero Clinton no va a dejar un pastel que es muy propio de los demócratas. En las elecciones de 2012 cerca de 71% del voto hispano fue para el actual presidente demócrata Barack Obama.
 
Y Hillary, quien desea ser la primera mujer que presida los destinos de la nación más poderosa del mundo, acaba de declarar, durante la Conferencia Anual del Consejo Nacional de La Raza (NCLR), que se celebra en Kansas City, Missouri, que "como presidenta lucharé cada día para lograr una reforma migratoria integral con un camino a la ciudadanía".
 
La ex secretaria de Estado y esposa del que fuera dos veces presidente de Estados Unidos, Bill Clinton, había dicho antes, en una conferencia en la Universidad New School, en Nueva York, que una "reforma migratoria integral" que incorpore a la economía formal a millones de trabajadores permitirá aumentar el Producto Interno Bruto en 700 mil millones de dólares en los próximos 10 años.
 
Con estos guiños, la ex primera dama estadounidense ha querido separarse de lo que la opinión pública considera su "extrema cercanía con los intereses de Wall Street". Además, ganarle el terreno a su inmediato perseguidor Bernie Sanders e irle quitando puntos hispanos no solamente a Jeb Bush, sino a personajes como el hispano Marco Rubio, que también lucha por la candidatura republicana.
 
La pregunta es si el gigante hispano seguirá consumiendo promesas de campaña los próximos años, porque la reforma integral en materia de migración que ofreció Obama en 2008 y 2012, no solo no se ha concretado, sino que ha hecho que dos millones de personas sean deportadas a sus países de origen, causando un estrago brutal en las familias de los inmigrantes.
 

This entry passed through the Full-Text RSS service - if this is your content and you're reading it on someone else's site, please read the FAQ at fivefilters.org/content-only/faq.php#publishers.

No hay comentarios.

Con tecnología de Blogger.