Lectio Divina: Miércoles V semana de Cuaresma Ciclo B
| LECTIO DIVINA MIERCOLES V SEMANA DE CUARESMA CICLO B ANUNCIACIÓN DEL SEÑOR |
Invocación al Espíritu Santo:
Ven Espíritu Santo, guíanos que vamos a leer las Sagradas Escrituras que Tú inspiraste.
Ven a nuestra vida, a nuestros corazones, a nuestras conciencias.
Mueve nuestra inteligencia y nuestra voluntad para entender lo que el Padre quiere decirnos a través de su Hijo Jesús, el Cristo.
Que tu Palabra llegue a toda nuestra vida y se haga vida en nosotros.
Amén
| TEXTO BIBLICO: Lucas 1, 26-38 «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo» |
1,26: El sexto mes envió Dios al ángel Gabriel a una ciudad de Galilea llamada Nazaret,1,27: a una virgen prometida a un hombre llamado José, de la familia de David; la virgen se llamaba María. 1,28: Entró el ángel a donde estaba ella y le dijo:
—Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.
1,29: Al oírlo, ella quedó desconcertada y se preguntaba qué clase de saludo era aquél.
1,30: El ángel le dijo:
—No temas, María, que gozas del favor de Dios.
1,31: Mira, concebirás y darás a luz un hijo, a quien llamarás Jesús. 1,32: Será grande, llevará el título de Hijo del Altísimo; el Señor Dios le dará el trono de David, su padre,1,33: para que reine sobre la Casa de Jacob por siempre y su reino no tenga fin.
1,34: María respondió al ángel:
—¿Cómo sucederá eso si no convivo con un hombre?
1,35: El ángel le respondió:
—El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso, el consagrado que nazca llevará el título de Hijo de Dios.
1,36: Mira, también tu pariente Isabel ha concebido en su vejez, y la que se consideraba estéril está ya de seis meses. 1,37: Pues nada es imposible para Dios.
1,38: Respondió María:
—Yo soy la sirvienta del Señor: que se cumpla en mí tu palabra.
El ángel la dejó y se fue.
BIBLIA DE NUESTRO PUEBLO
| LECTURA: ¿Qué dice el texto? |
El relato de la Anunciación del Señor comienza con una contextualización, “en el sexto mes”, se trata del sexto mes de embarazo de Isabel. El Ángel Gabriel es enviado a una virgen comprometida con José, conocido como el carpintero, perteneciente a la familia de David.
En esta mujer, en María, es el lugar que Dios eligió para venir en carne al mundo. ¡Alégrate!, fue el saludo del Ángel a María, un saludo muy particular, es el “alégrate” María, y tambien “alégrate” humanidad toda, la espera del pueblo de Israel a la promesa de Dios, esta cumplida.
María es la “llena de gracia”, es la elegida por su humildad y sencillez, para ser la madre del Salvador, es el arca de la nueva alianza. María, ante el saludo del Ángel quedo desconcertada, y se preguntaba que significaba aquel saludo.
Ante el anuncio del Ángel, de que concebirá y dará a luz al hijo de Dios, María entiende la misión que se le encomienda, a la vez que se pregunta como sería posible si no convivía con ningún varón, esta respuesta reafirma la virginidad de María.
El Ángel añade que su parienta Isabel, considerada estéril y entrada en años, se encuentra transitando su sexto mes de embarazo, “porque para Dios no hay nada imposible”. Esto sorprende aún más a María, que hace de su respuesta una oración “Yo soy la sirvienta del Señor: que se cumpla en mí tu palabra”.
María se hace servidora, acepta la palabra, la cumple, y deja que el verbo se haga vida en ella. María dice “hágase”, y gracias a este sí, cambia la historia, cambia nuestra propia historia.
En este texto vemos con claridad la relación de María con las tres Divinas personas:
| LECTIO DIVINA MIERCOLES V SEMANA DE CUARESMA CICLO B ANUNCIACIÓN DEL SEÑOR |
Invocación al Espíritu Santo:
Ven Espíritu Santo, guíanos que vamos a leer las Sagradas Escrituras que Tú inspiraste.
Ven a nuestra vida, a nuestros corazones, a nuestras conciencias.
Mueve nuestra inteligencia y nuestra voluntad para entender lo que el Padre quiere decirnos a través de su Hijo Jesús, el Cristo.
Que tu Palabra llegue a toda nuestra vida y se haga vida en nosotros.
Amén
| TEXTO BIBLICO: Lucas 1, 26-38 «Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo» |
1,26: El sexto mes envió Dios al ángel Gabriel a una ciudad de Galilea llamada Nazaret,1,27: a una virgen prometida a un hombre llamado José, de la familia de David; la virgen se llamaba María. 1,28: Entró el ángel a donde estaba ella y le dijo:
—Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo.
1,29: Al oírlo, ella quedó desconcertada y se preguntaba qué clase de saludo era aquél.
1,30: El ángel le dijo:
—No temas, María, que gozas del favor de Dios.
1,31: Mira, concebirás y darás a luz un hijo, a quien llamarás Jesús. 1,32: Será grande, llevará el título de Hijo del Altísimo; el Señor Dios le dará el trono de David, su padre,1,33: para que reine sobre la Casa de Jacob por siempre y su reino no tenga fin.
1,34: María respondió al ángel:
—¿Cómo sucederá eso si no convivo con un hombre?
1,35: El ángel le respondió:
—El Espíritu Santo vendrá sobre ti y el poder del Altísimo te cubrirá con su sombra; por eso, el consagrado que nazca llevará el título de Hijo de Dios.
1,36: Mira, también tu pariente Isabel ha concebido en su vejez, y la que se consideraba estéril está ya de seis meses. 1,37: Pues nada es imposible para Dios.
1,38: Respondió María:
—Yo soy la sirvienta del Señor: que se cumpla en mí tu palabra.
El ángel la dejó y se fue.
BIBLIA DE NUESTRO PUEBLO
| LECTURA: ¿Qué dice el texto? |
El relato de la Anunciación del Señor comienza con una contextualización, “en el sexto mes”, se trata del sexto mes de embarazo de Isabel. El Ángel Gabriel es enviado a una virgen comprometida con José, conocido como el carpintero, perteneciente a la familia de David.
En esta mujer, en María, es el lugar que Dios eligió para venir en carne al mundo. ¡Alégrate!, fue el saludo del Ángel a María, un saludo muy particular, es el “alégrate” María, y tambien “alégrate” humanidad toda, la espera del pueblo de Israel a la promesa de Dios, esta cumplida.
María es la “llena de gracia”, es la elegida por su humildad y sencillez, para ser la madre del Salvador, es el arca de la nueva alianza. María, ante el saludo del Ángel quedo desconcertada, y se preguntaba que significaba aquel saludo.
Ante el anuncio del Ángel, de que concebirá y dará a luz al hijo de Dios, María entiende la misión que se le encomienda, a la vez que se pregunta como sería posible si no convivía con ningún varón, esta respuesta reafirma la virginidad de María.
El Ángel añade que su parienta Isabel, considerada estéril y entrada en años, se encuentra transitando su sexto mes de embarazo, “porque para Dios no hay nada imposible”. Esto sorprende aún más a María, que hace de su respuesta una oración “Yo soy la sirvienta del Señor: que se cumpla en mí tu palabra”.
María se hace servidora, acepta la palabra, la cumple, y deja que el verbo se haga vida en ella. María dice “hágase”, y gracias a este sí, cambia la historia, cambia nuestra propia historia.
En este texto vemos con claridad la relación de María con las tres Divinas personas:
HIJA DE DIOS PADRE: “llena de gracia, el Señor está contigo” (V 28)
MADRE DE DIOS HIJO “Hijo del Dios Altísimo” “Será llamado Hijo de Dios” (V. 35)
ESPOSA DEL ESPÍRITU SANTO “V. 35)
| MEDITACION: ¿Qué me dice a mí el texto? |
Nos preguntamos para profundizar en nuestra vida estas palabras de Salvación:
- Reflexionamos entorno al discernimiento de María ¿Cuándo tengo que tomar una decisión importante, tomo el tiempo necesario para considerarlo y discernirlo? ¿Conozco, o busco conocer cual es mi vocación para servir a Dios de forma más adecuada? ¿En mi vida pastoral, pido a Dios que me guie y oriente, para hacer siempre su voluntad?
- Reflexionamos entorno a María como Servidora. ¿En mis tareas cotidianas, y tambien en las relacionadas a la parroquia, me pregunto a quien sirvo? ¿Tengo presente que solo debemos ser servidores del Señor? ¿Qué pasa cuando nos olvidamos, o lo cambiamos de lugar? ¿Qué me dice a mí, el ejemplo de servicio de María?
| ORACION: ¿Qué le digo yo al Señor? |
Orar, es responderle al Señor que nos habla primero.
- Gracias Señor, por María nuestra Madre, modelo e imagen de todos los cristianos.
- Señor que pueda decir como María, “Que se haga en mí según tu Palabra”.
- Hacemos un momento de silencio y reflexión para responder al Señor. Añadimos unas intenciones de oración.
| CONTEMPLACION: ¿Cómo interiorizo el texto? |
Para el momento de la contemplación podemos repetir varias veces este versículo del texto para que vaya entrando a nuestra vida, a nuestro corazón:
«Alégrate, llena de gracia, el Señor está contigo» (Versículo 28)
Y de esta forma nos ponemos en contemplación, junto a María, contemplamos al Padre, al Hijo y al Espíritu Santo, con los que María tiene una profunda relación.
| ACCION: ¿A qué me comprometo? |
Debe haber un cambio notable en mi vida. La lectura de la Biblia debe moverme desde el interior hacia acciones concretas. Imitemos a María en su docilidad.
Mi agradecimiento por creer en Jesús, se manifiesta con llevar la alegría cristiana a los demás. Que los demás puedan conocer también a Cristo por mi alegría y testimonio de encuentro con Cristo.
Hno Ricardo Grzona, frp y Cristian Buiani
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